Una vez llegó el primer lote de vacuna contra el COVID-19, este viernes una parte será trasladada a Santa Cruz para su distribución y aplicación al personal de salud. Quienes sean vacunados deberán estar en “condiciones óptimas de salud” y asumir el compromiso de recibir la segunda dosis.
La viceministra de Promoción, Vigilancia y Medicina Tradicional, María Renee Castro, explicó las condiciones establecidas para el personal de salud que se beneficiará con la inmunización en esta primera etapa del plan de vacunación que se desarrollará de forma progresiva.
Para recibir la primera dosis de forma voluntaria, el beneficiario debe comprometerse a recibir la segunda dosis, someterse a un examen médico para determinar que se encuentra en “condiciones óptimas de salud”, de pasar el examen será inoculado y luego deberá permanecer por 30 minutos en observación para ver si hay efectos adversos.
“Si todo está ok, van a recibir el carné de vacunación con la fecha en la que deben volver a recibir al segunda dosis”, explicó.
Desde Argentina llegaron pasadas las 17.00 las primeras 20.000 dosis de la rusa Sputnik V al aeropuerto de El Alto. El presidente Luis Arce recibió el lote, que luego fue trasladado en camiones, manteniendo la cadena de frío, a depósitos del Programa Ampliado de Inmunización (PAI), en el centro paceño.
Este viernes una parte será llevada a Santa Cruz, uno de los departamentos más golpeados por el rebrote del COVID-19. Bolivia tiene hasta el momento más de 200.000 contagiados desde marzo de 2020 y a más de 10.000 muertos.
Arce evitó revelar el plan de distribución.
Sin embargo, se anticipó que esas primeras vacunas serán aplicadas a médicos intensivistas y a quienes tienen contacto directo con los pacientes con coronavirus.
“Ahora con las vacunas en Bolivia, los municipios y las gobernaciones deben garantizar que el envío que nosotros hagamos se mantenga en la cadena de frío correspondiente, y luego ya a proceder con la vacunación correspondiente”, explicó Arce.