El ministro de Desarrollo Rural, Néstor Huanca, aseguró que garantizará la seguridad alimentaria y calificó de falta de consistencia técnica la alternativa propuesta por Anapo.
Los bloqueos en Santa Cruz fueron levantados. El Gobierno y los industriales soyeros acordaron formar mesas técnicas para analizar desde el jueves la propuesta del sector agroindustrial sobre la banda de precios para la venta de harina de soya en el mercado interno. El ministro de Desarrollo Rural, Néstor Huanca, adelantó que la alternativa no tiene consistencia técnica.
Desde Santa Cruz reportaron que persistían puntos de bloqueo en carreteras como a Trinidad hasta el mediodía, pero en horas de la tarde se confirmó que fueron levantadas. Los afiliados a la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) iniciaron el 22 de febrero un bloqueo en rechazo a la banda de precios fijada por el Gobierno.
La madrugada de este sábado concluyó una reunión entre Huanca y los representantes de los productores de soya sin llegar a una solución, pero acordaron formar mesas de trabajo técnicas.
“Anapo en este proceso de diálogo siempre mostró una posición intransigente, la misma que mostró la existencia de móviles políticos detrás de las movilizaciones, incitando a continuar con el bloqueo, incluso generando mensajes de audio donde indican que el financiamiento para tal objetivo estaba garantizado”, denunció Huanca.
Los industriales de la soya plantean que la banda de precios se mantenga por este año solo para los pequeños productores pecuarios, beneficiando con eso al 80% de estos productores, según un comunicado del sector.
Huanca anticipó que la propuesta carece de consistencia técnica.
“Se ha escuchado la propuesta de Anapo y no tiene consistencia técnica como manifestaron los mismos actores del complejo oleaginoso”, sostuvo.
La banda de precios determina que la industria oleaginosa pueda vender a precio justo en el mercado interno los subproductos de soya como harina de soya solvente (HSS), harina de soya integral (HSI) y cascarilla de soya que son fuente de proteínas para el sector pecuario.
Los sectores productivos denunciaron que se les vende a precios alto los derivados de la soya, por lo que respaldaron la banda de precios fijada por el gobierno de Luis Arce que restableció las restricciones a la exportación.