La ex Enarsa (actual Integración Energética Argentina, IEASA), cerró un contrato de exportación con la central termoeléctrica brasilera Ambar Uruguaiana Energía por casi 57 millones de metros cúbicos a u$s 43,80 por millón de BTU, lo que significará un costo final de la operación de 92 millones de dólares, de acuerdo a los datos que publicó la Secretaría de Energía.
Lo extraordinario es que los usuarios domiciliarios y las generadoras eléctricas pagan el gas en esta época del año a un promedio de u$s 2,87, gracias a la contractualización de la demanda en condiciones firmes y a mediano plazo (4 años) implementada en el Plan Gas, un programa que permitió un ahorro de u$s 1250 millones en importaciones solo en 2021.
Es decir que mientras la demanda interna está satisfecha -excepto en el invierno, cuando estacionalmente crece de forma exponencial por las bajas temperaturas-, gracias a la crisis energética global la Argentina puede aprovechar para hacer una diferencia millonaria con las exportaciones de oportunidad a los países vecinos.
IEASA licitó este mes una importación de gas licuado (GNL), en medio de un alza de esta commodity hasta los u$s 50 por millón de BTU en Europa. En el primer tender la única oferta estuvo por encima de los 60 dólares; mientras que en el segundo, pactó la semana anterior por debajo de los u$s 38, de acuerdo a lo que contó un trader a El Cronista.
La diferencia entre el costo de la importación y el precio de venta a Brasil quedará en la ex Enarsa, una vez descontados los derechos de exportación (retenciones) y los impuestos. En el mercado estiman que sería algo más de 7 millones de dólares.
El país gobernado por Jair Bolsonaro depende en un 60% de la generación hidroeléctrica para obtener energía. Pero desde hace dos años atraviesa una sequía (que impactó en la histórica bajante del Río Paraná) y tiene que recurrir a otras fuentes, como las importaciones de gas licuado en Río de Janeiro o de electricidad de Argentina, que pueden superar los u$s 200 el megavatio-hora.
La central Ambar Uruguaiana está en el estado de Río Grande do Sul y fue comprada hace unos meses por el grupo J&F a la empresa argentina Saesa. Tiene un contrato de deliver or pay (entregar o pagar) con el administrador del sistema eléctrico brasilero, por lo que aún con este precio del gas le convendrá generar energía antes que pagar sin entrar al sistema.