Las iglesias evangélicas de Bolivia iniciarán una cruzada con otros sectores religiosos para no participar del censo de noviembre de 2022 y califican la consulta como “fraudulenta y discriminadora” porque excluye de las consultas la identificación religiosa y la categoría mestizo.
En tanto, el Comité Pro Santa Cruz y todas las instituciones cruceñas afiliadas anunciaron que realizarán esta jornada una segunda marcha de protesta para exigir la realización de un censo inclusivo y transparente.
Evangélicos
“Es el momento de defender nuestra fe, hoy nos discriminan, nos marginan y nos ignoran por ser religiosos”, señaló a Página Siete el representante del Consejo Nacional Cristiano de las Iglesias Evangélicas de Bolivia, Luis Aruquipa, a tiempo de anunciar que las iglesias evangélicas no participarán del Censo Nacional de Población y Vivienda programado para el 16 de noviembre de este año.
“Como cristianos evangélicos no participaremos de un censo fraudulento y con vicios de nulidad. Al contrario, buscaremos una alianza estratégica con los católicos, adventistas, con la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y Pentecostales para que no participemos de este censo fraudulento”, anunció el representante del sector. Agregó que abrirán las puertas a los encuestadores, pero que no que responderán a las preguntas de los censadores.
“¿Qué dogma de fe practica? Es la pregunta que solicitó este sector que se incluya en la boleta censal para conocer la cantidad de personas que profesan una religión o creencia y así evitar que sean discriminadas en la toma de decisiones estatales.
En el último censo de 2012 no se tomó en cuenta la pregunta sobre la religión.
En ese contexto, Aruquipa afirmó que excluir la pregunta sobre qué religión profesan los bolivianos es excluir a más del 90% de las personas al tratar de ocultar su fe, lo que a su vez es caer en un delito de discriminación y racismo.
Cívicos
En Santa Cruz de la Sierra todas las instituciones que pertenecen al Comité Pro Santa Cruz saldrán esta jornada a las calles en una segunda marcha para exigir al gobierno de Luis Arce la realización de un censo inclusivo y transparente.
Una de las entidades que participará en la marcha es la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno que pide “información objetiva del plan de trabajo del proceso censal y sus avances”.
Además de la poca información sobre el censo, las organizaciones cruceñas observan y piden la inclusión del tema mestizo en la boleta censal. La oposición alertó que el Gobierno pretende “ningunear” al mayor porcentaje de la población al excluir el tema.
La ministra de Planificación del Desarrollo, Gabriela Mendoza, descartó el fin de semana incluir la categoría de mestizo en el censo, ya que, según ella, la mayoría de la población boliviana es indígena y que incluir esa categoría sería un retroceso en la evolución de la sociedad.
“Representa un retroceso para la sociedad. Incurriríamos en discriminación y racismo, porque es justamente de ahí que viene la discriminación de la raza humana, nosotros somos pueblos originario campesinos, la mayor parte de la población tiene una identificación”, agregó la ministra.
Piden censo inclusivo
La postura causó polémica y molestia en varios sectores de la población, como los evangélicos, que también afirman que esa exclusión es discriminatoria, en tanto que el senador de Comunidad Ciudadana Rodrigo Paz pidió al Gobierno que promueba un censo inclusivo.
“Parece que la boleta censal o el censo va a ser de los ninguneados. Ministra, no divida, generen un censo de la unidad y del futuro de los bolivianos”, afirmó Paz. Otra de esas observaciones es que hasta la fecha, el Instituto Nacional de Estadística (INE) no proporcionó información de cómo avanza la actualización cartográfica que debe estar lista para noviembre.
Se conoce que desde septiembre de 2021 hasta la fecha sólo se avanzó en un 17%.