Luego de nueve años sin brotes de esta enfermedad, el departamento de Santa Cruz registra un brote de coqueluche o tosferina. Cuatro casos fueron confirmados, todos correspondientes a niños de no más de cinco años. Dos tuvieron que ser hospitalizados y los otros siguen el tratamiento en casa.
“Se han presentado cuatro casos en el departamento de Santa Cruz, dos de ellos ya resueltos, en condiciones estos niños de control ya en domicilio. Los otros dos están internados, uno en el Hospital Mario Ortiz y el otro en el Hospital de Montero, ambos con evolución favorable. Son menores, de los cuales se ha detectado una enfermedad controlada en el país como es la tosferina o coqueluche”, afirmó el responsable nacional del Programa Ampliado de Inmunización (PAI), Max Enríquez.
La vigilancia epidemiológica se activó tanto de parte de la Gobernación cruceña como del Ministerio de Salud. Se monitorea a los pacientes, a la par que se busca prevenir que el coqueluche siga su propagación.
“Las edades (de los pacientes) fluctúan entre un mes y cinco años. Son niños que corresponden el primero a la red Norte de Santa Cruz, el segundo a la red Este, otro en Montero (…) el otro era proveniente de Comarapa”, afirmó el especialista.
La Gobernación de Santa Cruz declaró la alerta roja sanitaria por esta enfermedad, que no registraba casos hace años. Su prevención se realiza mediante la vacunación de bebés desde los dos meses, por lo que se sospecha que la baja cobertura de inmunización derivó en la reaparición de esta afección.
“Puede llegar a transmitirse entre 15 y 17 personas y esto determina de que esa facilidad en la transmisión nos ponga en riesgo a una población que de repente hemos dejado de pensar que las vacunas protegen vidas. Para nosotros las bajas coberturas de vacunación determinan estos puntos en los cuales ahora tenemos que sufrir el embate de una enfermedad”.
COQUELUCHE
El coqueluche o tosferina se transmite de persona a persona, mediante las gotículas expulsadas al momento de toser o estornudar. En Bolivia, hace nueve años que no se reportaban contagios de esta afección.
“Un brote que estamos presentando en Bolivia desde 2013, el 2013 hemos tenido tres casos en el departamento de Chuquisaca, uno de ellos con un fallecido, después tuvimos casos bien aislados, que se han podido controlar. Pero en esta oportunidad al tener a más de dos personas, ya se considera brote”, indicó Enríquez.
Al identificar un contagio, se aplica un bloque epidemiológico. Es decir, el paciente entra en tratamiento, se monitorea a sus contactos cercanos y luego se hacen controles al entorno de al menos 10 manzanas a la redonda, explicó el responsable nacional del PAI.
“Tenemos seis casos sospechosos”, aseveró el especialista, a tiempo de aclarar que esta enfermedad puede presentarse en cualquier grupo etario.
Dada su alta transmisibilidad, el Servicio Departamental de Salud (Sedes) decidió acortar el tiempo de vacunación. Ahora los bebés desde las seis semanas de vida pueden asistir por su dosis, antes era desde las ocho. Enríquez pidió estar atento a una tos persistente por más de dos semanas, vómitos, de presentar estos o síntomas como malestar general y congestión nasal, se pide asistir al establecimiento de salud más cercano.