Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) señala que duplicará producción de urea con la construcción de la segunda planta (que pretende consumir 1 TCF en 20 años); sin embargo a la fecha no realizó descubrimientos de nuevos yacimientos de gas, mientras la producción del energético apenas llega a 42 millones de metros cúbicos día (MMmd).
La invasión de Rusia a Ucrania redujo la oferta de urea al mercado internacional, pero la demanda se mantiene, por tanto, hace subir el precio de la urea en el mercado internacional, pero de acuerdo a medios digitales internacionales el valor está en alrededor de 451 dólares la tonelada métrica.
“Ante la creciente demanda mundial de urea, la segunda planta de este fertilizante es uno de los megaproyectos de industrialización que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) comenzará este año con la realización de los estudios y diseños de ingeniería. Se proyecta que en 20 años consumirá 1 trillón de pies cúbicos (TCF) de gas natural”, de acuerdo a la estatal petrolera.
«Tenemos como meta la construcción de la segunda planta de urea, estamos analizando los pormenores (
). Apuntamos a que tenga el doble de la capacidad que tiene la Planta de Amoniaco y Urea (PAU) y convertir a Bolivia en un hub (concentrador) de fertilizantes», informó ayer el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, citado en un boletín.
En la actualidad la PAU, ubicada en Bulo Bulo-Cochabamba, tiene una producción de 364,6 miles de toneladas métricas anuales de urea. Además, su alta calidad le ha permitido ganar rápidamente mercados (Argentina y Brasil) hoy la demanda crece desde Paraguay, Brasil, Argentina y países de Europa, entre otros, que buscan adquirir el producto boliviano.
“Un ejemplo de la demanda y la oportunidad es que tenemos a Brasil, que es un monstruo de consumo. Existe una amplia demanda de mercado ya que 10 plantas de urea, como la PAU, abastecerían solo al estado de Mato Grosso”, precisó la autoridad.
En Brasil, la urea boliviana puede generar ventaja competitiva por tema logístico ya que este país es cercano a Bolivia mientras que la urea de otros continentes, que llega allí, tiene costos logísticos muy altos.
La urea, además de demostrar el éxito de la industrialización, es un ejemplo claro de seguridad alimentaria. La urea como fertilizante nos garantiza alimentos y no solo para Bolivia sino para la región por eso iniciamos, esta gestión, con la ingeniería para la construcción de la segunda planta y ser proveedores de la región.
Para comenzar el nuevo proyecto, se tiene previsto licitar el estudio durante esta gestión. El costo de la etapa de pre inversión es de 1,29 millones de dólares, de los cuales se ejecutarán 1,11 millones durante este año.
YPFB busca duplicar producción de urea sin haber encontrado nuevos yacimientos
SourceEl Diario