El acuerdo firmado entre Bolivia y China para instalar dos complejos industriales con tecnología de Extracción Directa de Litio (EDL), en los salares de Potosí y Oruro, implicará una revolución técnico-científica sobre el oro blanco del siglo XXI, así lo afirmó el experto Bruno Lima.
El especialista, entrevistado por el periódico digital Sputnik, señaló que “si otros países copian el modelo boliviano de industrialización del litio y cuentan con una asociación rentable para la transferencia de tecnología, pueden tener éxito”.
Asimismo, explicó la importancia de sustituir la tradición latinoamericana de exportación de minerales por una compleja transformación de la materia prima.
“Es decir, no se limitará a vender en el mercado internacional, sino que intentará crear un ciclo completo. Una parte del litio se vende al mercado internacional, por ejemplo, a China, pero se dedica a procesar, transferir y desarrollar tecnológicamente la otra parte”, manifestó.
Lima, profesor de Relaciones Internacionales y autor del artículo “La ‘guerra del mineral de litio’ y el Imperio en América Latina”, consideró que el modelo boliviano es interesante, pero se necesita dinero en efectivo para hacer la aportación. En ese sentido, señaló que fuentes del Banco del Sur y del banco BRICS podrían ayudar en ese proceso.
“Si estas operaciones se hacen al margen del patrón dólar, entonces sería perfecto. Realmente estaríamos hablando de un salto de calidad para la presencia latinoamericana en el mercado y en el sistema internacional”, aseveró.
Según el convenio que YLB suscribió recientemente con la empresa China CATL BRUNP & CMOC (CBC), la empresa estatal boliviana supervisará todo el proceso de industrialización del metal blando, desde la extracción hasta su comercialización, recurso que actualmente es demandado en el mercado internacional.
En una primera etapa, la empresa China invertirá más de $us 1.000 millones para la puesta en marcha y construcción de los complejos industriales.