El Gobierno apunta al nuevo bloque de oposición de ocasionar una especulación sobre una supuesta crisis económica en el país, hecho que, según la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, no existe porque el Ejecutivo aplica políticas económicas para no afectar a la población.
“Para nada existe una crisis económica estructural como de manera sistemática y coordinada maneja el nuevo bloque de oposición como está intentando instalar con especulación en la gente”, manifestó en conferencia de prensa.
Según el Gobierno, algunos legisladores del MAS del “ala evista”, de Creemos y de Comunidad Ciudadana, además de exautoridades del gobierno de Evo Morales, tienen el objetivo de boicotear la gestión económica del presidente Luis Arce.
Alcón lamentó que algunos sectores se presten a esos comentarios y anuncien medidas de presión para que se atiendan sus demandas, pese a que el Gobierno garantiza la subvención y el abastecimiento de combustible y de algunos de los alimentos de la canasta familiar.
Debido a las largas filas en surtidores por una supuesta escasez de combustible, los choferes del transporte pesado anunciaron un bloqueo de caminos para la siguiente semana, 3 y 4 de junio. También un sector de los gremiales advirtió con asumir la misma medida a partir del 10 de junio si el Gobierno no los convoca para que atienda sus demandas.
Diálogo
No obstante, Alcón pidió a estos sectores reflexionar y dialogar porque el asumir el bloqueo de caminos afecta a la economía del país y, principalmente, al de la población.
“Lo más importante es señalar, la vía siempre es dialogo y en este momento un bloqueo o medidas de presión solo perjudica a la misma población y frena el avance y el proceso que se tiene sobre la situación económica. Hay un tema de desinformación, hay una situación de politización y buscar, como el presidente del Estado lo decía ayer, esos golpes blandos, esa desestabilización”, dijo.
Recordó que el Ejecutivo, escuchando al pueblo, omitió algunas normas como solicitaron algunos sectores sociales. También afirmó que se garantiza la provisión de carburantes en el país. Dijo que, pese a existir una sobredemanda de 10 millones de litros, el abastecimiento se realiza de manera normal.
Respecto al incremento de precios de algunos productos, Alcón atribuyó a una inflación importada, por lo que reiteró que se apuesta por la política de industrialización con sustitución de importaciones para que ese tipo de efectos en otros países no se susciten en el territorio nacional.