Respecto a la reciente posesión de Alejandro Gallardo como ministro de Hidrocarburos, el presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, consideró que la autoridad tiene poco tiempo para generar un cambio estructural en materia hidrocarburífera y energética, porque reposicionar a Bolivia como un exportador de gas es una tarea que debe ejecutarse a largo plazo, que no podrá ser resuelta en los meses que le queda de gestión al presidente Luis Arce.
Romero mencionó que uno de los grandes retos que tiene a mediano plazo, es aminorar la importación de diésel y gasolina para evitar el desabastecimiento, buscar precios más competitivos para generar un ahorro estatal. Sin embargo, refirió que esto se trata de una crisis fiscal que hace que el Estado actualmente no tenga los dólares para pagar oportunamente y de manera eficiente a sus proveedores internacionales.
El economista indicó que una de las esperanzas para el país es encontrar un nuevo megacampo de gas, lo que ve que aún no está próximo.
Otro de los aspectos que cree importante para cambiar el actual panorama, es cambiar la Ley de Hidrocarburos, ya que mientras no haya incentivos ni se trabaje para atraer capitales extranjeros estratégicos para explorar, producir y comercializar hidrocarburos, difícilmente YPFB y el Ministerio de Hidrocarburos van a poder hacer mucho.
“Cuando hay voluntad política todo es posible, pero el tema es que existe un trasfondo político, porque ni con el gobierno de Evo Morales ni con el de Luis Arce se ha tomado de manera seria y sostenible esa modificación a la Ley de Hidrocarburos, y de hecho si es que se plantearía o hubiera un planteamiento del Gobierno, van a haber trabas políticas entre la oposición y el ala evista”, indicó.