Cuando en Bolivia ya se han arrasado cerca de 4 millones de hectáreas, el Gobierno nacional informó este miércoles que se promulgó el decreto supremo 5225 con el que declara pausa ambiental en Bolivia, que consiste básicamente en prohibir por tiempo indefinido las quemas.
«La pausa ambiental es indefinida hasta que se realicen los trabajos de repoblamiento de áreas afectadas y evaluación de puesta en financiamiento de condiciones ambientales afectadas», manifestó Alan Lisperguer, ministro de Medio Ambiente en conferencia de prensa.
Explicó que la pausa ambiental ecológica fijada en el decreto 5225 determina que todas las autorizaciones de quemas emitidas por la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierra (ABT) quedan suspendidas y prohíbe también la emisión de nuevas autorizaciones.
«Las tierras fiscales disponibles afectadas por quemas e incendios serán consideradas tierras fiscales no disponibles por un periodo mínimo de cinco años hasta que se proceda a su restauración y posterior utilización», dice el artículo 4 del decreto.
Además, se enfila un plan de repoblamiento de fauna y flora que estará bajo la responsabilidad del Ministerio de Medio Ambiente, mientras que las carteras de Defensa y de Gobierno reforzarán el resguardo de áreas protegidas y reservas forestales a nivel nacional.
Además se envió un proyecto de ley para endurecer las sanciones contra quienes causen o provoquen quemas o incendios, con penas de cárcel de hasta 13 años. Para los causantes de los incendios las sanciones oscilarían entre 6 y 13 años de cárcel y para quienes se beneficien con la ejecución del incendio el castigó sería de entre 5 y 7 años de prisión, informó la agencia ABI.
«Anteriormente teníamos penas menores y con este proyecto de ley se están incrementando las penas por la generación de incendios. Esto apunta a las personas que promueven un incendio que afecte bosques, tierras forestales, reservas, áreas protegidas, tierras fiscales, humedales o pastizales», explicó Lisperguer.
El ministro de Medio Ambiente adelantó que desde este jueves el presidente Luis Arce se trasladará junto a todo su gabinete a Santa Cruz para encabezar la lucha contra los incendios.
Plataformas ambientalistas han cuestionado la tardía reacción del gobierno nacional, gobernaciones y alcaldías para prevenir las quemas, pese a que es un mal recurrente principalmente en Santa Cruz y Beni. Estimaciones preliminares consideran que la situación es peor que la del año 2019 cuando el fuego arrasó más de 5 millones de hectáreas en Santa Cruz.