Mediante un comunicado, la Asociación Nacional de Surtidores Comercializadores Privados de Hidrocarburos (Asosur) se declara en estado de emergencia nacional debido a la “crisis actual que atraviesa el sector” y exige al Gobierno la restitución de los volúmenes requeridos de combustibles para cubrir la demanda nacional.
Además, pide la liberación de aranceles aduaneros para la importación de repuestos específicos que necesitan las estaciones de servicio.
La nota indica que la situación económica está generando un “impacto profundo a nuestras operaciones; poniendo en riesgo la continuidad de nuestros servicios y la estabilidad económica de nuestras empresas”.
“Desde el inicio de esta crisis, venimos enfrentado limitaciones en el suministro de combustibles, aumento de costos operativos de hasta un 120%; generando un impacto negativo en el empleo, que ocasiona directamente una reducción del personal operativo y administrativo; debido a la baja rentabilidad por la falta de regularización de comisiones”, indica el documento.
Asosur
La Asosur pide al Gobierno la restitución de los volúmenes requeridos para cubrir la demanda de la población “y la liberación de aranceles aduaneros, mientras dure esta crisis; para la importación de los repuestos específicos que necesitamos en las estaciones de servicio”.
Asimismo, exhorta a las autoridades a dialogar con el sector para lograr un mejor entendimiento y brindar seguridad jurídica; que resguarde la inversión y actividad formal del sector.
Hace varias semanas, el flujo de combustible que llega al país se vio afectado por temas climatológicos en Arica, donde se descarga el carburante de importación, y los bloqueos que afectaron su ingreso a Bolivia. Pese al esfuerzo del Gobierno, la distribución de carburantes aún presenta dificultades en algunas regiones del país.
Autoridades nacionales atribuyen estos problemas al agio, la especulación y el contrabando de combustibles que se vende a precios más altos en los países vecinos.
En agosto, ya la Asosur advirtió su “profunda preocupación” por las recientes medidas asumidas por el Gobierno que, en su criterio, incluyen “la asignación discriminatoria de volúmenes de combustible en las estaciones de servicio denominadas estratégicas, favoreciendo con volúmenes adicionales”.