Trabajadores de salud de 31 centros médicos del sistema público de salud de La Paz iniciaron este martes un paro de 72 horas en protesta por los despidos del personal por parte del Servicio Departamental de Salud (Sedes).
Este martes, el sector anunció que instalará 31 puntos de bloqueos en la ciudad y, en caso de no ser atendidos, radicalizarán sus medidas. Un comunicado indica que durante esta jornada cerrarán vías en las avenidas Saavedra de la zona Miraflores; Camacho y la plaza Bolivia, frente al edificio del Sedes.
Según informes de la Federación Sindical de Trabajadores en Salud Pública de La Paz, sin argumentos valederos, unas 20 personas fueron despedidas en La Paz, El Alto y las provincias. Exigen la restitución laboral inmediata de los afectados.
“Es personal invitado”
El gobernador Santos Quispe dijo que se trata de “personal invitado”, incluso desde gestiones pasadas, y la Gobernación está en su derecho de cambiar por otros profesionales “de su confianza”. Indicó que plantea una convocatoria abierta para que se institucionalicen los cargos; sin embargo, “los trabajadores que entraron políticamente no quieren”.
La autoridad descartó que haya una “masacre blanca”, como denuncian los dirigentes. “Apenas en un año hemos desvinculado a 16 personas, no son 100, 200 personas. El Sedes tiene más de 1.500 de personal de salud y tenemos el derecho de mandar a nuestro personal. Si entra otro gobernador, también pondrá su personal; somos invitados en estos cargos”, explicó en conferencia de prensa.
Asimismo, criticó el accionar de los sindicatos que se “eternizan” en los cargos y promueven el nepotismo. “Hemos lanzado una convocatoria abierta para cualquier profesional de salud; ya vamos a posesionar al nuevo personal, transparentemente”, indicó.
“Personal de libre nombramiento desde la gestión de (Félix) Patzi (exgobernador) tengo más de 200 y yo solo he sacado este año 16 personas”, acotó.
Salud
En tanto, el director del Sedes, Juan Carlos Camacho, dijo que la protesta afecta a la salud de toda la población y explicó que siempre hay rotación de personal y eso está establecido en acuerdos. “Hay que dar oportunidad a gente nueva; les pido un poco de empatía, están jugando con la salud de la población”, reclamó.
Las protestas comenzaron hace dos de semanas con marchas en inmediaciones de la Gobernación y del Sedes. La dirigencia advirtió que, si sus demandas no son atendidas, la próxima medida que asumirán es una huelga general de hambre.
Los despedidos se instalaron en carpas en afueras del Sedes y realizan una huelga de hambre hace nueve días. Denuncian que los despidos son constantes en el Sedes y no existe seguridad laboral.