A mediados de octubre, el Gobierno logró acuerdos entre los tres principales frigoríficos de Santa Cruz (BFC, Frigor y Fridosa) y la Federación de Trabajadores en Carne de Santa Cruz (Fedecarcruz), para destinar un cupo extra de carne de exportación -100 reses diarias por frigorífico- para incidir en la disminución del precio en los mercados de la capital cruceña.
A casi un mes de los acuerdos, los precios continúan altos, según constató EL DEBER en algunos mercados de la ciudad. La carne ‘de primera’ se encuentra entre Bs 45 y 50; la de ‘segunda’ entre Bs 35 y 38.
El ejecutivo de Fedecacruz, Gonzalo Serrudo, indicó que los frigoríficos no están cumpliendo el acuerdo y estarían entregando ‘carcasas’ (reses) de baja calidad y a un precio kilo gancho de entre Bs 29 y 30, cuando el compromiso era de bajar a un precio referencial de Bs 24,50.
Ante la situación, Serrudo anunció que luego de un ampliado en Cochabamba, la semana pasada, se decidió dar un plazo de 72 horas al Gobierno -a partir del jueves 7 de noviembre-para brindar una solución a los altos precios de la carne, caso contrario ingresarán en paro indefinido con “desabastecimiento total”.
Según Serrudo, con los actuales precios por kilo gancho, el producto en los mercados debería estar en Bs 55 los cortes de ‘primera’ y Bs 40 los de ‘segunda’. “El gobierno, pareciera que nos estaba utilizando en el tema de hacer compromisos formales ante la opinión pública. Y que, lamentablemente, nosotros tengamos que ser vistos como los especuladores, como los que le estamos subiendo el precio a la canasta familiar”, expresó Serrudo.
En ese sentido, manifestó que los carniceros tienen bajas ventas y no pueden recuperar su capital. Explicó también que Santa Cruz requiere entre 2.000 a 2.500 carcasas por día. “Aparentemente entre las tres empresas exportadoras tendrían que haber distribuido 300 carcasas día, pero la demanda es más grande del sector carnicero. Somos más de 84 mercados y esas 300 reses lamentablemente no alcanzan ni para el 20% de nuestro sector”, lamentó el dirigente.
EL DEBER intentó conocer la versión de los tres frigoríficos de Santa Cruz, pero no se pudo obtener respuesta. Uno de ellos indicó que enviaría un pronunciamiento, pero hasta el cierre de la presente nota, no se la recibió.