La crisis financiera que atraviesa el municipio de Santa Cruz de la Sierra tiene en jaque al menos a cuatro sectores como empresas constructoras, instituciones culturales y teatros, personal de salud y hasta un colegio al que le cortaron la energía eléctrica por facturas impagas a carogo de la alcaldía.
Freddy Guardia, del gremio de los constructores, denunció que 40 empresas del rubro esperan desde hace más de un año el pago de Bs 70 millones por obras realizadas para la alcaldía, como mantenimiento de escuelas, hospitales y centros deportivos. A pesar de haber sostenido reuniones con las autoridades, los compromisos de desembolso no se han cumplido.
Agrega que han continuado con las obras con su propio capital pero la situación se ha vuelto insostenible.
La deuda también afecta severamente al sector cultural. La Escuela Nacional de Teatro, dirigida por Marcos Malavia, enfrenta el riesgo de cierre debido a la falta de pago de Bs 550.000 financiados por la alcaldía. Este dinero estaba destinado al Festival de Teatro Joven, que beneficia a más de 700 estudiantes del Plan Tres Mil.
“La situación es insostenible; tuvimos que despedir a la mitad del personal administrativo”, alertó Malavia.
Percy Añez, presidente de la Asociación Pro Arte y Cultura (APAC), señaló que el municipio sigue adeudando de Bs 700.000 de su aporte para el XIV Festival de Música Barroca y Renacentistas Americana, realizado entre el 19 y 28 de abril de este año. Hace varias semanas el Concejo ya autorizó el pago, pero el trámite está desde hace un mes en el área contable, según el gestor cultural.
La secretaria de Cultura y Turismo, Sarita Mansilla, reconoció la gravedad de la situación, pero aseguró que los pagos dependen de la Secretaría de Finanzas.
El corte de energía eléctrica en el histórico Colegio Nacional Florida por facturas impagas dejó a cientos de estudiantes sin clases. Padres de familia, como Jorge Sárate, denunciaron la irresponsabilidad de la Alcaldía, que adeuda al menos cinco meses de facturas. “Es inadmisible que nuestros hijos no puedan estudiar por falta de servicios básicos”, reclamaron.
Mientras tanto, la concejala Lola Terrazas responsabilizó al alcalde por la crisis financiera, calificando la situación como “producto de la corrupción y el mal manejo de los recursos municipales”.