El 13 de noviembre, el Gobierno Nacional promulgó el Decreto Supremo 5271, que autoriza la libre importación de combustibles y su comercialización en el mercado interno por parte de privados. La medida, lejos de traer tranquilidad a los sectores productivos, ha sido calificada como un “gasolinazo camuflado”. Son varios los actores que coinciden al afirmar que esto va a encarecer más los costos de producción.
El Gobierno se ha comprometido a terminar con las filas y normalizar el abastecimiento, pero las colas para cargar diésel continúan. En el caso de la gasolina las filas son menores, pero es el carburante que suele acabarse a media tarde. El servicio en la mayoría de los surtidores ya no es continuo como solía ser hace tiempo atrás.
Subirán los fletes
El ejecutivo de la Federación del Autotransporte “15 de Abril”, Gabriel Pérez, señaló que el sector ya vive una especie de “gasolinazo”, debido a la escasez de carburantes, los precios elevados en las nuevas variedades, además de la disminución de sus ingresos por la baja productividad que tienen.
Precios Advierten que los costos de los carburantes importados por privados dependerán del precio internacional, logística y tipo de cambio
Pérez manifestó que si el Gobierno está autorizando a los privados la importación de carburantes para garantizar el abastecimiento, el sector del transporte, a fin de evitar las largas filas, se verá orillado a comprar este combustible, que va a tener un precio más caro ya que no gozará de subvención. En consecuencia, los fletes y pasajes también van a incrementar.
“Por ejemplo, si tenemos que entregar una carga en Chile y nos ponen un tiempo establecido, que si no llegamos tenemos multas ¿entonces qué tenemos que hacer? Es echar mano a eso, y será un costo más alto”, indicó.
El dirigente del transporte se esperanzó en que el combustible importado por los privados no superare los 8 bolivianos el litro.
¿Cuánto costarán los carburantes no subvencionados?
El analista y presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija, Fernando Romero, se animó a precisar que los carburantes importados por el sector privado van a alcanzar un costo aproximado de 11 bolivianos la gasolina y 14 bolivianos el diésel, esto considerando los costos de transporte, logística, almacenaje, impuestos y demás factores que van a incidir el traer combustible desde afuera.
Romero mencionó que a pesar del Decreto 5271 serán pocas las empresas que van a optar por importar los carburantes, debido a que en el mercado nacional continuarán ofreciendo el producto subvencionado a 3,72 bolivianos el diésel y 3,74 la gasolina.
“De todo el mercado interno, del 100%, y siendo muy optimistas, un 3 a 5% va a tener la posibilidad de importar para consumo o comercialización, porque ya estudios de entidades especializadas privadas, adelantan que al público llegará a costar el litro de gasolina casi 11 bolivianos y el litro de diésel 14 bolivianos”, expuso.
Manifestó que por la difícil situación económica por la que atraviesa el país, para muchas familias será costoso comprar los carburantes que sean importados por privados. Consecuentemente, la población deberá seguir padeciendo la escasez y hacer filas por un cupo.
No podrán controlar el precio
El analista en hidrocarburos y energía, Jaime Balanza, adelantó que al importación y comercialización de carburantes para los privados, será difícil para la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) controlar los precios, debido a que estarán influenciados por el costo internacional, y la cadena logística, ya que el transporte no es por ductos, sino por camiones.
“Otro factor que va a determinar el precio de los combustibles cuando importen los privados sin subvención va a ser el tipo de cambio. En un par de días el dólar en el mercado paralelo ha variado en Tarija, de 10,53 a 11 bolivianos, entonces el precio es dinámico y esa dinámica no acepta las rigideces establecidas en la normativa. Entonces, creo que no va a tener la efectividad que la gente espera”, apuntó.
Balanza ratificó que tener carburantes más caros en el país, disparará los costos de producción en diferentes frentes, desde el transporte hasta el sector productivo.
Valor referencial de $us1,1
El gerente de Comercialización de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Joel Callaú, sostuvo que el “valor referencial” que maneja la estatal para el combustible que podrá ser importado y comercializado por el sector privado está en torno a $us 1,1 dólar.
“Esa es la cifra que maneja ya un trader de YPFB: Botrading S.A., que brinda el servicio de importación de diésel y gasolinas. Incluso, la petrolera estatal ya ofreció sus plantas para almacenamiento de estos combustibles”, recalcó.
Cardozo: No hay dólares para mantener la subvención
El exasambleísta departamental y político chaqueño, Wilman Cardozo, señaló que la promulgación del Decreto 5271 es un “dieselazo” y “gasolinazo” camuflado del Gobierno nacional para luego lavarse las manos y culpar al sector privado cuando no haya combustible en las estaciones de servicio. Agregó que el Estado ya no tiene la capacidad de solventar la subvención por la falta de dólares.
“El Gobierno no importa hidrocarburos en base a la demanda que tiene el pueblo boliviano, no por falta de combustible, sino porque no tiene dólares, ya no le alcanza la plata para seguir sosteniendo la subvención, que han manejado de manera demagógica en los últimos 20 años”, indicó.