La Agencia Internacional de Energía (AIE) ha publicado su último informe sobre la energía del carbón, que revela que la demanda mundial de carbón alcanzará un máximo histórico en 2024.
La mayor parte del crecimiento se limita a los mercados chino e indio. Se espera que la demanda de carbón en China crezca un 1% en 2024 hasta alcanzar los 4.900 millones de toneladas (Bt), otro récord.
Se prevé que la demanda de India crezca más del 5% hasta 1,3 Bt, cifra que solo China había alcanzado anteriormente. Sin embargo, la AIE sostiene que la demanda podría estancarse hasta 2027 si China comienza a dejar de depender del carbón como fuente de energía.
Actualmente, China consume un 30 por ciento más de carbón que el resto del mundo junto, y dos factores principales contribuyen a este crecimiento: la electrificación de servicios que antes eran proporcionados por otros combustibles y el surgimiento de centros de datos de IA en todo el país.
China ha invertido mucho en su sector de centros de datos en los últimos años. Según Liu Liehong, director de la Oficina Nacional de Datos de China, el país ha invertido más de 6.100 millones de dólares en centros de datos desde 2022. Como resultado, se espera que el consumo de electricidad de los centros de datos en China aumente más del cinco por ciento para 2030.
El informe también destaca que la disminución de la tasa de consumo de carbón en las economías avanzadas ha comenzado a desacelerarse. Esto es especialmente evidente en los mercados de la Unión Europea (UE) y los Estados Unidos, donde la demanda de electricidad del sector eléctrico ha llevado a una disminución más lenta. Como resultado, el consumo de carbón en la UE y los Estados Unidos va camino de disminuir un 12% y un 5%, respectivamente, este año, en comparación con el 23% y el 17% en 2023.
Varias empresas de servicios públicos estadounidenses han citado la demanda energética de los centros de datos como una razón para extender la vida útil de sus plantas de energía a carbón. Con la creciente demanda de energía de la IA y la computación de alto rendimiento, las empresas de servicios públicos están actualmente luchando por obtener toda la energía disponible, especialmente en los puntos de acceso de los centros de datos. El Instituto de Investigación de Energía Eléctrica ha estimado que los centros de datos podrían consumir hasta el nueve por ciento de la generación de electricidad de EE. UU. anualmente para 2030, frente al cuatro por ciento en 2023.
El mes pasado, la empresa de servicios públicos estadounidense Southern Co. dijo que estaba considerando extender la vida útil de algunos de sus activos alimentados con carbón para satisfacer la demanda energética de los centros de datos y otras propiedades comerciales e industriales. Según su director ejecutivo, Chris Womack, la empresa está considerando un plan de generación que incluya “todo lo anterior” y, como parte de su estrategia, podría extender la vida útil de su instalación de carbón de cuatro unidades y 3.450 MW en la Planta Bowen, en Georgia.