La Confederación de Panificadores de Bolivia aceptó la propuesta del gobierno y no incrementará el precio del pan de batalla, que se mantendrá en Bs 0,50.
Así lo confirmó el ejecutivo de la institución, Rubén Ríos, a los medios estatales, al final de un ampliado del sector. “Con la propuesta que nos ha hecho, unas afinaciones más y firmamos. Se mantiene (el precio del pan)”, remarcó el dirigente.
Poco después se hizo la firma formal del acuerdo con el ministro de Desarrollo Productivo, Néstor Huanca en La Paz.
El lunes se trabó el diálogo y los panificadores anunciaron un paro de 72 horas en La Paz, que comenzó este martes, pero que se iba a levantar al momento de firmar el acuerdo.
El sector barajaba la posibilidad de subir el precio a Bs 0,70 por unidad con
“Este esfuerzo es para mantener el costo del pan a 0,50 centavos la unidad de pan de batalla a un peso de 60 gramos la unidad”, resaltó Huanca.
Según el compromiso, el gobierno entregará 2,5 millones de bolsas de 50 kilos al sector, 100 mil más que el año pasado, a precio subvencionado. El año pasado cada bolsa tenía un costo de Bs 133.
En los mercados, el precio de la harina incluso llegó a Bs 300 el quintal. También se les dotará de 126 mil quintales de azúcar, 144 mil cajas de manteca de 16 kilos y 48 mil cajas de levadura.
Los panificadores de Santa Cruz no reciben harina subvencionada debido a que no elaboran la variedad del pan de batalla. En esta ciudad, el sector eliminó el vendaje o yapa que entregaba a los comerciantes de mercados y tiendas de barrio, lo que ha implicado en la práctica un incremento.
Antes el costo era de Bs 0,50 la unidad, pero ahora se dan dos panes por Bs 1,50 u ocho por Bs 5., según reportes.