Habitantes del municipio fronterizo de Puerto Quijarro denunciaron que hay una limitada distribución de garrafas de GLP en los últimos días. Por esto, se generan largas filas de personas en los puntos de parada de los camiones.
Además, los vecinos comentaron que la situación es aprovechada por revendedores que venden una garrafa hasta en 45 bolivianos, cuando el precio oficial es Bs 22,50.
Por eso, expresaron su molestia y demandan que las autoridades competentes realicen el control, además de abastecer a la zona.
«Antes la distribución y venta se hacía en puertas de Yacimientos, pero ahora es al frente donde se para el camión, vende en la calle», denunció un vecino.