En un ampliado ordinario del Movimiento Al Socialismo (MAS) en el departamento de Beni, el presidente Luis Arce dijo que las próximas elecciones serán determinantes para el país y exhortó a elegir a asambleístas que sí trabajen “por los intereses del pueblo”, en contraposición con los legisladores actuales.
“Bolivia necesita una Asamblea Legislativa que apoye lo que se trabaje en favor del pueblo, no que lo sabotee. En estas elecciones, el pueblo boliviano tiene que pensar y analizar muy bien, nosotros siempre vamos a creer en esa sabiduría del pueblo, porque es ella la que nos dará una Asamblea acorde con los desafíos y trabaje por el pueblo”, afirmó el mandatario.
Arce
En las elecciones del próximo 17 de agosto los bolivianos elegirán al presidente y vicepresidente, 130 diputados, 36 senadores y nueve representantes supraestatales.
Según Arce, la situación del MAS ahora es diferente, pues “recuperaron” el instrumento político, por lo que se podrá elegir a los legisladores de manera orgánica y no con “dedazo”, como –dijo— ocurría cuando Evo Morales era jefe del partido.
“Ahora son ustedes los que van a decidir libremente a sus candidatos, sin dedazos”, dijo el mandatario a los presentes.
El Presidente criticó fuertemente a los actuales asambleístas y los responsabilizó de la situación económica que a traviesa el país. Lamentó que esa tendencia contraria al Gobierno haya venido del interior del MAS, en referencia a los legisladores afines a Morales.
Recordó que existen 16 proyectos de créditos por un monto superior a $us 1.600 millones a la espera de ser aprobados. Sin embargo, consideró que diputados y senadores no darán el visto bueno a ninguno, pues tienen el objetivo de “sabotear” su gestión.
Arce también felicitó a la bancada arcista, a la cual calificó como “bancada patriota”, pues en estos años defendieron los intereses de su región y buscaron el desarrollo.
El mandatario espera que en las próximas elecciones se elija más asambleístas con ese “compromiso con su país”.
A seis meses de los comicios, Arce aún no oficializó su candidatura, pero cada vez más organizaciones piden que se repostule, aunque la opinión pública condena su gestión.