Pese al acuerdo firmado en noviembre del año pasado para estabilizar el precio de la carne de res, el costo del kilo gancho sigue aumentando y en algunas regiones ya supera los 40 bolivianos. Ante esta situación, el Gobierno convocará a la Confederación Nacional de Trabajadores en Carne de Bolivia (Contracabol) para evaluar el incumplimiento del convenio, informó el viceministro de Defensa de los Derechos del Usuario y del Consumidor, Jorge Silva.
“Vamos a convocar a Contracabol para discutir y evaluar los resultados del acuerdo de noviembre. Sentimos que el sector ganadero y productivo no cumplieron, pero tampoco lo hizo Contracabol. Nosotros hemos cumplido”, afirmó Silva, enfatizando que el Gobierno no fija el precio de la carne y que los incrementos responden a decisiones de los ganaderos.
Por su parte, el dirigente de Contracabol, Rubén Soria, denunció que el precio del kilo gancho subió en 5 bolivianos esta semana, alcanzando los 40 bolivianos en algunos mercados. Con este incremento, la pulpa de primera supera los 70 bolivianos para los consumidores. “Estamos indignados porque el Gobierno no ha tenido la capacidad de solucionar el problema, mientras los carniceros somos culpados injustamente por los usuarios”, expresó.
Silva recordó que el Gobierno atendió la demanda de los carniceros suspendiendo las exportaciones, pero los ganaderos siguen vendiendo su ganado a contrabandistas o reteniéndolo en confinamientos, manteniendo el precio elevado. Ante este panorama, anunció que se convocará a los matarifes y a las autoridades nacionales para un nuevo diálogo en busca de soluciones.