Al menos 500 camioneros procedentes de Bolivia se encuentran varados desde hace más de dos semanas en una ciudad cercana a Asunción, a la espera de cargar combustible, informó este miércoles el defensor del Pueblo de Paraguay, Rafael Ávila.
Para el defensor, la presencia de 700 u 800 camiones cisterna «es una bomba de tiempo» e indicó que los transportistas permanecen en un estacionamiento del municipio de San Antonio, en el departamento Central.
«Ahí se llegan a albergar entre 500 (camiones), 700 en algunos momentos y 800 en otro momento», declaró a EFE el ombudsman, quien advirtió que en algunos casos hay camioneros que llevan 20 días varados y hasta un mes.
«Es extremadamente peligroso para toda la población», agregó Ávila, al señalar que el pasado 4 de abril recibieron una denuncia de parte de vecinos del estacionamiento, que, aseguró, alberga «una cantidad muy importante» de camiones que llegan a comprar combustible debido al desabastecimiento en Bolivia.
La Defensoría del Pueblo alertó, en una nota enviada el pasado 7 de abril al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades), de que la presencia de camiones cisterna en ese estacionamiento representa un «alto riesgo» de incendio, explosión o contaminación por sustancias inflamables.
También advirtió de la situación a la Municipalidad de San Antonio y solicitó información sobre las medidas de seguridad y de mitigación en el estacionamiento y sus permisos para operar.
Ávila agregó que «la mayor preocupación» es que en la zona hay «largas horas sin agua», que consideró «un condimento más peligroso» en caso de que surja algún evento de emergencia.
«Lo que nosotros queremos es que ellos adecúen sus instalaciones. Nosotros no entramos en la parte comercial, no nos interesa eso, nosotros estamos detrás de que se le dé seguridad a los que están dentro y a todos los que están viviendo alrededor de este lugar», enfatizó.
El año pasado, al menos cuatro conductores bolivianos fallecieron en Paraguay, dos en tránsito y otros dos en un hospital de la localidad de Ñemby (centro), mientras trabajaban en el transporte de combustibles hasta su país.