El ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, criticó duramente la decisión de la jueza Lilian Moreno Cuéllar, que anuló la orden de aprehensión contra el expresidente Evo Morales por el caso de presunta trata de personas con agravante. Del Castillo calificó el fallo como una “payasada” y aseguró que esta acción constituye un delito de desobediencia a resoluciones judiciales, sancionado con hasta seis años de cárcel según el Código Penal boliviano.
“Lamentablemente, esta payasada que ha cometido esta juez, está tipificada como el tipo penal de desobediencia a resoluciones judiciales. Nosotros vamos a pelear, como siempre lo hemos hecho, con la justicia boliviana”, afirmó Del Castillo en una declaración pública, exigiendo que se aplique una sanción ejemplar a la jueza Moreno.
El fallo judicial dejó sin efecto la orden de captura contra Evo y paralizó la investigación, ordenando además que el proceso se traslade al departamento de Cochabamba, pese a que una resolución anterior del Tribunal en La Paz ya había dispuesto que el caso debía desarrollarse en Tarija.
“No puede ser que con un plumazo, o una firma, se eche abajo un proceso penal, negando justicia a las víctimas de violación”, enfatizó el ministro.
Del Castillo también confirmó que el Ejecutivo coordina con distintas instituciones para proteger a las víctimas del caso, asegurando que la resolución emitida en Santa Cruz es “nula de pleno derecho”.
Asimismo, respaldó el anuncio del Consejo de la Magistratura y del Tribunal Supremo de Justicia de iniciar investigaciones de oficio contra la jueza Lilian Moreno Cuéllar.
“La justicia debe alcanzar a todos por igual, sin importar su rango o poder. Aquel que intente burlar la ley deberá enfrentarse a las consecuencias”, señaló Del Castillo, en referencia implícita al expresidente Morales.