Los postulantes a gobernar el país comparten sus propuestas para enfrentar la crisis fiscal, modernizar el Estado y acelerar la transición energética. Coinciden: el litio no salvará la economía y urge un ajuste institucional profundo.
En un país golpeado por la caída de ingresos por hidrocarburos y una economía que da señales de fatiga, los candidatos a esta elecciones generales se dieron cita en Santa Cruz para hablar de lo que más duele —y lo que más urge—: energía, economía y el futuro de Bolivia.
El foro, organizado por la Universidad Privada de Santa Cruz de la Sierra (UPSA), el Colegio Nacional de Economistas de Bolivia (Coneb) y la revista ENERGÍA Bolivia, reunió a representantes de tres binomios que buscan gobernar el país: Rodrigo Paz Pereira (PDC), Jorge Richter (vicepresidenciable por Morena) y José Luis Lupo (candidato a vicepresidente de Alianza Unidad).
“Hablar de energía y economía hoy es hablar del porvenir del país. Las decisiones en estos sectores marcarán nuestra competitividad y sostenibilidad”, sostuvo en la apertura la rectora de la UPSA, Lauren Müller de Pacheco.
Gas en declive, subsidios insostenibles y litio sin milagros
En el primer bloque temático, los candidatos expusieron su diagnóstico y propuestas sobre el sector energético, en particular frente a la caída en la producción y exportación de gas natural, que ha puesto en jaque las finanzas públicas y la balanza comercial.
Los postulantes coincidieron en la necesidad de reformar el modelo hidrocarburífero, revisar las políticas de subvención e importación de combustibles y plantearon acelerar una transición hacia fuentes renovables, con mayor inversión en exploración y tecnología.
Sobre el litio, todos reconocieron su importancia estratégica, pero alertaron que no resolverá por sí solo los problemas estructurales del país. “No hay energía más cara que la que no se tiene”, fue una de las frases que se repitió en el encuentro.
Seguridad jurídica, reforma del gasto y confianza en la moneda
El segundo bloque estuvo enfocado en la visión económica de los candidatos, donde se abordaron temas como la reforma del gasto público, la urgencia de recuperar la confianza en el boliviano, la lucha contra la corrupción, y la necesidad de generar empleo e inversión sin sacrificar la soberanía ni el medioambiente.
Todos los candidatos apuntaron a la modernización del Estado, reducción del gasto improductivo y fortalecimiento de la institucionalidad, como condiciones clave para atraer capitales y restablecer la estabilidad.
“Este foro busca algo más que discursos: queremos propuestas viables que combinen crecimiento económico con sostenibilidad y responsabilidad”, dijo Jorge Akamine, presidente del Coneb.
Sin confrontación, pero con claridad
El foro no permitió el debate directo ni repreguntas, y las interrogantes fueron enviadas previamente a los candidatos. Aun así, las diferencias entre enfoques fueron claras: unos apuestan por mayor inversión pública, otros por el impulso privado y la apertura económica.
La moderación estuvo a cargo del economista y analista energético Juan Fernando Subirana, quien destacó que, pese a matices, hubo coincidencias estructurales: la necesidad de despolitizar el sector energético, recortar el gasto corriente y frenar la improvisación en la política económica.