El último debate del Tribunal Supremo Electoral (TSE) reunió solo a tres candidatos, quienes coincidieron que, para superar la crisis, urge reducir gastos, modificar varias leyes e impulsar la producción.
Pavel Aracena, de Libertad y Progreso ADN; Rodrigo Paz Pereira, del Partido Demócrata Cristiano (PDC,) y Eduardo del Castillo del Movimiento Al Socialismo (MAS), presentaron este martes sus propuestas económicas.
No participaron en el debate Samuel Doria Medina (alianza Unidad), Jorge Tuto Quiroga (Libre), Manfred Reyes Villa (APB -Súmate), Andrónico Rodríguez (Alianza Popular) y Jhonny Fernández (La Fuerza del Pueblo).
Del Castillo
Del Castillo habló de su plan de gobierno Bolivia Primero que se enfoca en plata y vida, y dijo que prevén traer $us 12.000 millones para impulsar el agro, la minería y los hidrocarburos; además de reforzar la exportación y generación de divisas.
“Tenemos un plan de gobierno que quiere transformar la realidad de las grandes mayorías. El MAS hizo cosas muy buenas y otras la pudo hacer mejor, por eso queremos gobernar. Para atraer inversiones en el agro, la minería e hidrocarburos plantea cambiar al menos siete leyes”, dijo.
Aseguró que su plan apunta a invertir en el desarrollo productivo y generar inversión y competitividad. “Queremos dar un crédito para mejorar la producción. Hay que invertir en los agropecuarios, en los campesinos con recursos necesarios para transformar la vida. Produzco hoy y pago mañana”, indicó.
Ofreció, además, el denominado Plan 5 Estrellas que consiste en cinco proyectos carreteros y uno con ferrocarril para conectar Santa Cruz con La Paz.
El candidato del MAS ofreció la reducción de 17 a 12 ministerios y crear uno nuevo de Comercio Exterior; además bajar de 56 a 31 viceministerios para tener un ahorro de Bs 240 millones que serán reinvertidos en el pueblo.
Garantizó que su plan de gobierno tiene nuevas ideas y prometió transformar la vida de los bolivianos. Además, defendió a las empresas públicas y aseguró que en 2024 generaron utilidades para programas de salud y educación y rechazó un “industricidio” de parte de los otros partidos.
Aracena
Aracena dijo que, para resolver la crisis, se requieren $us 6.000 millones y los conseguirán mediante un referéndum en Oruro, Potosí y Santa Cruz para que autoricen vender hasta el 3% de las reservas de litio y tierras raras. “En 60 días vamos a conseguir el dinero que nos permitirán estabilizar el dólar, comprar combustible adelante y generar recursos”, dijo.
Además, habló de proyectos para recuperar el oro y legalizar el ahorro de los bolivianos para autorizar el ingreso a las cuentas de hasta $us 100.000 millones sin que deban decir el origen de esos recursos.
Respecto a la industrialización del litio dijo que se hará de forma transparente y que cada ciudadano podrá revisar en su celular los contratos y ofertas.
El candidato de ADN dijo que el país necesita ingeniería y propuso libertad para producir, reforma tributaria pro industrialización, revolución en infraestructura, revolución en mercados internacionales y atracción de inversiones y el desarrollo del capital humano basado en visión industrial. “Haremos diplomacia económica”, dijo.
Apuntó al apoyo a los jóvenes profesionales bolivianos con créditos y oportunidades laborales.
Aracena rechazó la posibilidad de ofrecer un perdonazo tributario porque “el país vivió de vivillos, gente que espera no pagar impuestos. Cada quien paga lo que debe, somos pro empresa privada, queremos que Bolivia alcance la economía de libre mercado”.
Dijo que los empresarios, mypes y emprendedores participarán en procesos de supervisión y no serán extorsionado por impuestos.
“Vamos a reducir el tamaño del Gobierno y los gastos”, prometió.
Paz
Paz planteó la urgencia de reducir el “Estado obeso” y propuso que el ciudadano sea propietario de los recursos naturales y reciba una renta directa. Asimismo, reducir el déficit y cortar la subvención a los hidrocarburos para las grandes empresas.
El candidato también ofreció sincerar el tipo de cambio del dólar, cambiar el Banco Central de Bolivia, que no solo emita moneda, sino de manejar la política monetaria. “Vamos a repatriar $us 7.000 millones dando beneficios tributarios y financieros”, indicó, y remarcó la importancia del 50/50 para el manejo de recursos del gobierno y las regiones abriendo el “estado tranca”.
Urgió también la necesidad de cambiar leyes como las de inversiones, hidrocarburos y minera y anunció un salario universal para las mujeres que emprenden y cuidan la casa.
“Para la economía informal habrá crédito barato, impuestos y aranceles por debajo de 10 (por ciento), cerrar la Aduana corrupta y vamos a adelgazar este estado obeso. Los jóvenes tendrán su crédito también”, complementó.
Además, ofreció otorgar un perdonazo tributario para incentivar la formalidad y créditos baratos.
Según el candidato, los recursos naturales no serán propiedad de empresas privadas ni del Estado, sino del pueblo. “Hay que dar un crédito semilla para apoyar a los jóvenes para emprender o para educarte y derrotemos al estado tranca”.
Respecto al subsidio a los hidrocarburos dijo que solo genera plata al contrabando y debe eliminarse, al igual que el control de ingreso de divisas.