La situación de los pacientes oncológicos en el departamento de Tarija atraviesa uno de sus momentos más críticos. La escasez de medicamentos y el colapso en la atención especializada se han convertido en los principales obstáculos para quienes luchan contra el cáncer, un problema que el Servicio Departamental de Salud (Sedes) reconoce como estructural y que, advierte, requiere una respuesta urgente y coordinada entre los distintos niveles del Estado.
“El problema es muy serio y no es reciente”, afirmó el director del Sedes, Nils Casson, al señalar que las falencias actuales son una herencia acumulada de gestiones anteriores. En ese contexto, expresó su expectativa de que con el nuevo Gobierno, encabezado por Rodrigo Paz, se generen condiciones más favorables para garantizar una atención oportuna y digna a los pacientes oncológicos.
Uno de los puntos más críticos identificados por la autoridad sanitaria es la falta de personal humano para cubrir turnos nocturnos en el área de quimioterapia, situación que limita severamente la capacidad de respuesta del sistema de salud.
Casson informó que recientemente una representante del Sedes de Tarija viajó a la ciudad de La Paz para gestionar soluciones ante el nivel central del Estado. Sin embargo, la respuesta recibida fue que el país atraviesa un periodo de transición gubernamental, acompañado de procesos de auditoría, lo que por ahora dificulta la toma de decisiones inmediatas.
Mientras tanto, los pacientes siguen enfrentando un sistema saturado. Frente a estas limitaciones, el Sedes ha intentado ampliar los horarios de atención, aunque reconocen que estas medidas resultan insuficientes ante la creciente demanda.
El director del Sedes relató un caso que grafica la gravedad de la situación, el dirigente de los pacientes renales de Villa Montes se ofreció a ceder uno de sus tres turnos de diálisis para que otra persona pueda recibir atención. “Eso no puede pasar. Nadie debería poner en riesgo su propia salud para que el sistema funcione”, enfatizó.
Para Casson, este escenario evidencia la necesidad urgente de una coordinación entre el Gobierno nacional, las gobernaciones y los municipios. “El sistema de salud tiene que poder absorber la demanda. Sé que no es una competencia exclusiva del municipio, tampoco del Ministerio de Salud, pero entre todos podemos conseguir una solución para los pacientes”, afirmó.
Recordó que, en el primer encuentro sostenido entre el Ministerio de Salud y los Sedes de todos los departamentos, el nivel central expresó su predisposición de otorgar mayor rectoría a los gobiernos departamentales en materia de salud. No obstante, ese compromiso aún no se ha materializado.
La crisis actual se suma a los recientes reclamos de los pacientes oncológicos, quienes en días pasados exigieron al Gobierno nacional la implementación de una política de arancel cero para la importación de medicamentos, como una medida para abaratar costos y garantizar el abastecimiento.



















