El secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Mario Argollo, fue tajante. «Al ver la negativa de la abrogación del decreto 5503, todas las bases por unanimidad han decidido no tener una Navidad. Vamos a luchar y seguir con el paro general indefinido movilizado», afirmó el dirigente. De esta manera, rompen el diálogo iniciado en horas de la tarde con el Gobierno y anuncian una radicalización de las medidas de presión.
En un ampliado de emergencia de la COB, reiteraron su posición de no dialogar mientras el Gobierno mantenga su posición cerrada de no eliminar el decreto. Esta posición ratifica lo expresado por Argollo a la salida de la reunión sostenida la tarde del martes con el Ejecutivo Nacional en la Casa Grande del Pueblo. El diálogo se interrumpió sin resultados inmediatos ni positivos.
Después de tres horas de reunión, el dirigente de la COB quien se dirigió a los medios de comunicación que aguardaban fuera del edificio.
«(…) hubo reunión (con el gobierno). Por eso, hemos escuchado la propuesta del Ejecutivo de manera puntual. (Y éste) nos ha hecho conocer que no hay la intención de abrogar el decreto 5503. Y nosotros, como Central Obrera Boliviana, a encargo de nuestras bases, hemos venido con esa posición (la abrogación del decreto)», explicó Argollo.
En horas de la mañana del mismo martes, La Paz vivió una jornada de violencia y tensión con amagues de enfrentamientos y la detención de ocho mineros que participaban de las protestas. También se informó sobre varios heridos, entre ellos cinco policías que resguardaban los accesos a la Plaza Murillo.
Según remarcó el dirigente de la COB, hicieron conocer sus observaciones de manera directa al presidente Rodrigo Paz. «(…) le hemos hecho conocer nosotros al Presidente las observaciones que tenemos. En ese sentido, el presidente Paz también ha explicado de manera puntual el porqué está haciendo este tema, se ha hecho este decreto. Le hemos hecho conocer la molestia que debería de haberse socializado con anterioridad. Y tal vez nos hubiéramos evitado muchos problemas», advirtió.
Tras el encuentro de emergencia sostenido por la dirigencia de la COB, Argollo aseguró que los trabajadores han decidido sacrificar las fiestas de fin de año en favor de su lucha. En tono enfático, cuestionó la medida asumida por el Gobierno que elimina la subvención a los hidrocarburos y eleva el precio de los combustibles. Además, tildó el Decreto Supremo 5503 como «antiobrero y antipopular». E inmediatamente lanzó la advertencia. «Si no ponemos el pecho a las balas en este momento, la historia nos va a juzgar», sentenció el ejecutivo.


















