La Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) a través de su presidente Óscar Justiniano planteó aplicar el seguro agrario a pequeños, medianos y grandes productores que perdieron cultivos por inclemencias climatológicas.
“El seguro agrario debe ser trabajado con el sector privado productor; necesitamos trabajar en un elemento que funcione bajo una lógica económica para que haya seguridad de que lo que se siembre pueda estar cubierto ante las inclemencias climatológicas y otras que puedan venir, no nos olvidemos del fuego”, dijo.
El representante de los agropecuarios dijo que frente a un cambio climático real, con nevadas en pleno verano en Cochabamba y una gran cantidad de lluvias en corto tiempo, como sucedió en Santa Cruz, es importante que se implemente políticas de Estado a nivel nacional, departamental y municipal, que deben saber responder ante los problemas climatológicos.
“Si bien se siguen cuantificando las pérdidas porque no hay que olvidar que no ha dejado de llover, va a seguir el pronóstico de lluvias fuertes más ligados hacia los días de Carnaval, aunque eso también se va moviendo (…). Por el momento ya van más de 40 millones de dólares en afectación, pero muy dirigido a pequeños productores y eso es lo más preocupante”, afirmó.
Justiniano explicó que por análisis realizados por la CAO y la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), la principal causa de las inundaciones es una deficitaria gestión en distintos niveles de Gobierno que no entienden que la canalización de las aguas por efecto de las lluvias puedan concluir en ríos.
“Y eso pasa porque al ser pequeñas, medianas o grandes propiedades privadas o comunitarias cada uno busca dónde descargar sus aguas y lo hace en los vecinos. Cuando vemos las imágenes lo que se constata es que la mayoría de las inundaciones se dan por aguas estáticas, es decir que la falta de planificación, canalización”, explicó.
Según el presidente de la CAO, los cultivos de soya han sido los más afectados, siendo que son estratégicos para la economía nacional.
“Hay cerca de 1,1 millón de hectáreas de soya y las altas expectativas de los productores por los altos precios que está teniendo el grano de oro que es uno de los motores no solo en la cantidad de exportación que ingresa por concepto de divisas, sino también en la generación de empleos en todo el país porque la cadena productiva es extremadamente grande”, sostuvo.