La Confederación de Maestros Urbanos de Bolivia ratificó su marcha del 6 de marzo en contra de la nueva malla curricular, dispuesta por el Ministerio de Educación a partir de esta gestión.
Los dirigentes dieron un plazo de 72 horas al Gobierno para que deje sin efecto dicha modificación a los contenidos educativos.
“Se ha determinado que para el 6 de marzo contingentes de maestros van a llegar a La Paz (…) La malla curricular abarca factores que no han sido analizados de manera técnica y mucho menos pedagógica”, dijo Patricio Molina, uno de los ejecutivos nacionales a Unitel.
Asimismo, indicó que, pese a las explicaciones del sector, “no ha habido una respuesta positiva a los planteamientos que hemos hecho”.
“Los ejecutivos (de todos los departamentos) han expresado la molestia y la rabia contra el ministro de Educación (Édgar Pari)”, apuntó Molina.
Desde el Ministerio de Educación se dijo que los cambios a los contenidos educativos “no son una renovación completa de la malla curricular, sino que se trata de una actualización”.
“Por responsabilidad, hemos decidido no implementar este año la nueva malla curricular. Vamos a continuar con la anterior malla curricular y (también con) las medidas (de protesta)”, señaló Molina.
Otra de las exigencias de los maestros es que se defina un presupuesto para educación y se incremente la carga horaria.
Maestros dan plazo de 72 horas
En esa misma línea, el dirigente Ludwin Salazar habló de un plazo de 72 horas al Gobierno.
Esa medida tiene el fin de evitar que la movilización del 6 de marzo se realice y que se instale el diálogo.
“El Magisterio Urbano de Bolivia da un plazo de 72 horas al ministro de Educación (Edgar Pary) para que pueda atender de forma inmediata a las demandas del Magisterio”, dijo a la misma red.
Además, señaló que la petición d ellos maestros “va más allá de la anulación de la nueva malla curricular”.
“Nos hemos enterado de que se está distribuyendo ítems a nivel nacional”, dijo, y señaló que ese sector “también necesita de nuevos ítems para garantizar la formación de los estudiantes”.
La modificación a la malla curricular escolar derivó en movilizaciones por parte de los maestros urbanos, que rechazan su implementación.
Eso generó el descontento en los maestros que se movilizaron el pasado 8 de febrero.
Por su parte, el titular de Educación manifestó su “apertura” al diálogo, con el fin de hallar una solución al requerimiento de los movilizados.
Sin embargo, no se conoció de una fecha para ese encuentro.