La moneda nacional sigue siendo estable, así aseguraron analistas consultados por EL DEBER, que señalaron que la diferencia entre el tipo de cambio oficial y el que está en el mercado informal, es bajo. Eso sí recomiendan al Gobierno dar señales más claras para frenar la demanda inusual de dólares, que, según ellos, se disparó después de que el Ejecutivo implementara una seria de medidas para captar dólares del sector privado, ofreciendo un cambio preferencial a los exportadores.
Desde hace 15 días la demanda de dólares se disparó en Bolivia, la situación más extrema se vive en Santa Cruz, donde la divisa se cotiza en Bs 7 y entre 7,10 y 7,15 para la venta.
El Gobierno, a través del Banco Central de Bolivia (BCB), atribuyó este requerimiento extraordinario a la especulación generada por redes sociales y analistas, que desde hace meses observan la caída de las Reservas Internacionales Netas (RIN).
Para frenar esta decisión, el ente emisor decidió vender esta moneda de forma directa, con apoyo del Banco Unión, al tipo de cambio oficial de Bs 6.86 para la compra y de Bs 6,96 para la venta. Incluso decidió ampliar el horario de atención hasta las 21:00 ante las largas colas que formaron tras anunciarse la medida.
¿Pero por qué la moneda nacional aún es estable?
El especialista en finanzas, Jaimen Dunn, señaló que, si bien la demanda de dólares provocada por la caída de las RIN, genera mucha susceptibilidad e hizo variar el tipo de cambio en el mercado, asegura que la moneda nacional sigue siendo estable.
Recordó que la mayoría de los depósitos del sistema financiero están en bolivianos, al igual que la cartera de crédito y eso, para él, es una fortaleza.
“El hecho que la cartera de créditos esté en bolivianos y los depósitos también es una fortaleza importante, eso es fundamental”, señaló Dunn.
Por eso, insistió en que “hay que tomar medidas de señales de mercado para que la gente no tenga incentivo para sacar bolivianos a fin de comprar dólares”.
“Por eso es importante que se dé seguridad. Hasta ahora las autoridades no han hablado del gasto extremo que tiene el Estado”, sostuvo.
En esa línea, explicó que hay dos tipos de devaluación: la del Gobierno y la que causa la gente con la especulación.
“Por eso hay que tener cuidado. El Gobierno debe dar señales al mercado, el precio es el mejor comunicador de información de las cosas y si el precio de algo sube es porque algo está mal. Y el Gobierno debe responder, el precio desmiente lo que dicen las autoridades”, apuntó.
En esa línea, el economista German Molina sostuvo que la moneda nacional se mantiene estable por la baja inflación y porque hasta el momento el aparato productivo, en especial el exportador, no se ha detenido.
Las exportaciones continúan, una parte de esos dólares incluso van a terminar por ingresar a las RIN, explicó Molina.
Cabe recordar que el BCB ofreció pagar hasta Bs 6,95 por cada dólar que los exportadores, en especial los de Santa Cruz, entreguen al ente emisor.
No obstante, el especialista sostuvo que la alta demanda de dólares demuestra una alta desconfianza al Gobierno. Y aseguró que las colas formadas para comprar la divisa disminuirán a medida que el BCB atienda el requerimiento de dólares, no solo del público sino de los bancos y de los importadores.
“En cuando cumplan se bajará la desconfianza. Porque si bien todo está en bolivianos, la gente está comenzando a buscar opciones para el ahorro”, señaló.
Sostuvo también que en el mercado hay otra cantidad de dólares que no es registrada y se va a mantener.
“Comenzó un proceso de devaluación lenta”
El exdirector de la Fundación Milenio, Napoleón Pacheco, tiene una opinión distinta. Para él, el país ya entró en un proceso de devaluación lenta a “raíz de los resultados que todos ya conocemos”.
“La gente está preguntando qué va pasar, y lo que puede venir es que comience a sacar sus depósitos en bolivianos para comprar dólares”, dijo.
Sostuvo que la alta demanda de dólares comenzó cuando el Gobierno anunció que los compraría a los exportadores, a un tipo de cambio preferencial, que supera la cotización de compra oficial.
“Cuando se ofrece un tipo de cambio preferencial en los hechos se está devaluando, y a partir de esto comienza la desconfianza y la compra de dólares. El precio en algunas casas de cambio ha estado en Bs 7,10. Y la desconfianza ha ido creciendo a medida que los bancos no han devuelto las solicitudes de retiros de los depósitos”, dijo.
Mientras tanto, en Santa Cruz, numerosos ciudadanos realizaron filas fuera del Banco Unión y sus sucursales para comprar y retirar dólares; sin embargo, se tuvieron que marchar, molestos, porque les informaron que aún no tenían las divisas. «El Gobierno es mentiroso, no hay dólares nos dicen en los bancos», protestó una mujer.