Estrategias para mantener una nutrición adecuada en tiempos de escasez

En momentos de escasez de alimentos, es fundamental adoptar estrategias que aseguren una nutrición equilibrada y la ingesta adecuada de nutrientes. Una de las tácticas clave es la planificación de los menús semanales, lo que permite organizar los alimentos disponibles y optimizar su uso. Es recomendable priorizar el consumo de productos frescos antes de que se deterioren y reservar aquellos de mayor durabilidad para su uso posterior.

Almacenamiento y conservación son aspectos igualmente cruciales para enfrentar la escasez. Conocer técnicas como la deshidratación, congelación y la conservación en frascos, ya sea en forma de encurtidos o conservas, ayuda a preservar los nutrientes de los alimentos y a reducir el desperdicio. Además, es esencial almacenar los alimentos en lugares secos, frescos y oscuros para prolongar su vida útil.

En tiempos de carencia, diversificar las fuentes de alimentos puede marcar la diferencia. Esto puede incluir el cultivo de vegetales en casa mediante pequeños huertos, la recolección de alimentos locales y el intercambio comunitario. Incluso un huerto casero con hierbas, tomates o lechugas puede proveer alimentos frescos y sostenibles.

Es importante también priorizar alimentos nutritivos y energéticos. Legumbres como lentejas, garbanzos y frijoles, junto con cereales integrales como el arroz y la avena, y frutos secos, ofrecen una gran cantidad de nutrientes y calorías. Estos alimentos, además de ser altamente nutritivos, se conservan por largos períodos.

Otro aspecto relevante es controlar las porciones y practicar el racionamiento. Ser consciente de la cantidad de alimentos consumidos ayuda a prolongar las reservas disponibles, manteniendo un equilibrio entre la ingesta y las necesidades nutricionales. Aprovechar todas las partes comestibles de los alimentos, como cáscaras, hojas y tallos, también es fundamental para maximizar el valor nutricional. Un ejemplo es preparar caldos con restos de vegetales y huesos, lo que extiende el uso de los recursos disponibles.

En resumen, estas estrategias, combinadas con una mentalidad de ahorro y sostenibilidad, son esenciales para mantener una alimentación balanceada y saludable durante tiempos de escasez de alimentos.

SourceEl Día

ÚLTIMAS NOTICIAS