Los bancos hace tiempo implementaron los límites al uso de la divisa estadounidense, pero esta media se aplica también en bolivianos. Los clientes ya no pueden hacer uso de sus ahorros de acuerdo a sus necesidades, sino a la disposición de efectivo que tenga el banco y los afectados lamentan que no haya entidad que pueda defenderlos de las acciones de algunas entidades financieras.
“Estoy de vacaciones en Salta Argentina. Soy cliente del BCP (Banco de Crédito Popular) hace 15 años. Antes de salir de Bolivia hice los trámites para poder usar mi tarjeta de débito en Salta. Todo aceptado. Aquí, en Salta, quise usar mi tarjeta y fue rechazada. Me comunique con el BCP, su respuesta fue: qué a pesar de tener 5.000 bolivianos en mi cuenta, el límite de gasto es de 205 bolivianos al mes”, escribió un cliente afectado por la decisión de la entidad financiera.
La consulta se trasladó a la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), a los comunicadores, pero no hubo respuesta a la inquietud del cliente.
A pesar que en una conferencia del año pasado autoridades de la ASFI indicaron que no hay un corralito, pero en los hechos el “corralito disimulado” se aplica al poner límites al uso de los ahorros en moneda extranjera, pero ahora también en el exterior se aplica en bolivianos.
El año pasado el Banco Central de Bolivia (BCB) entregó divisas al sistema financiero de alrededor de 700 millones de dólares, una cifra menor a la que realizaba años anteriores.