El reordenamiento del transporte público implementado por la Alcaldía Municipal volvió a desatar enfrentamientos entre comerciantes que apoyan y rechazan la medida, además de forcejeos con gendarmes que hacen el control.
La mañana de este jueves, la calle Florida y primer anillo se convirtió en escenario de empujones, gritos y hasta golpes. Un gendarme terminó en el suelo, al igual que una comerciante, en medio del caos.
El incidente agravó las tensiones entre el alcalde Jhonny Fernández y los transportistas, toda vez que incluso se suspendió la reunión en la que se discutiría el reordenamiento y las demandas del sector. Ante esta situación, la dirigencia de los micreros ratificó el paro indefinido a partir del lunes, que coincide con el inicio de clases.
En conferencia de prensa, Fernández defendió las medidas implementadas para ordenar el tráfico y advirtió con sanciones a los transportistas que desde el lunes vienen realizando protestas en la Quinta Municipal para exigir incremento en el pasaje de micros y rechazar el plan municipal.
“Hemos reducido los canales del centro de 16 a 8. Ahora hay más orden, menos caos y más espacios para estacionar. No vamos a retroceder”, afirmó el burgomaestre.
“El ordenamiento sigue, va porque va. Durante décadas, la población lo ha esperado y lo vamos a hacer realidad. No permitiremos que el centro de la ciudad siga sumido en el caos. Se mantendrán los ocho canales y quienes no se adecúen serán sancionados. Si persisten en el incumplimiento, serán retirados de sus rutas”, insistió Fernández.
Paro indefinido
Este jueves, los transportistas volvieron a concentrarse en las afueras de la Quinta Municipal. La dirigencia adelantó que hoy realizarán un ampliado donde se analizará situación del transporte y se tomarán determinaciones respecto al paro indefinido que acatarán desde el lunes.
“Hubo un incidente en un sector (en el centro de la ciudad) y están culpando al transporte, cuando nosotros no generamos esa situación. La reunión (con el alcalde) fue cancelada. El paro indefinido sigue en pie y no se descarta que las provincias se sumen con bloqueos”, afirmó el dirigente Bismark Daza.
No obstante, señaló que no se cierran al diálogo y esperan que el burgomaestre los convoque a dialogar a fin de encontrar una solución al conflicto.
Al respecto, Fernández indicó que el municipio el miércoles abrió una mesa técnica para tratar los reclamos del sector, pero acusó a los transportistas de incumplir los acuerdos. “Quedamos en reunirnos para revisar el tema técnico y económico, pero en lugar de eso siguen bloqueando y presionando con paros”, señaló.
El alcalde reiteró que no cederá ante las presiones del sector transporte. Recordó que el municipio exige a los transportistas registrarse en Santa Cruz de la Sierra, pagar impuestos municipales, instalar cámaras de vigilancia y mejorar su flota. Según Fernández, hasta que estos requisitos no se cumplan, no se hablará de un ajuste en el pasaje.
División
El conflicto por el reordenamiento en el centro se desató cuando un grupo de dueños y vendedores de talleres mecánicos bloqueó la vía con carteles que decían “No micros”. No era solo una advertencia: estaban decididos a impedir el paso del transporte público, convencidos de que la nueva ruta los estaba ahogando económicamente. “Los clientes no tienen dónde estacionar, nuestras ventas han bajado”, indicaban. Incluso un hombre se lanzó al piso para impedir el paso de un micro.
Sin embargo, otros comerciantes del mercado Florida intentaron despejar la calle, asegurando que el reordenamiento beneficia a sus negocios al facilitar el acceso de compradores.
“No dejan pasar a los micros. Yo necesito llegar a mi trabajo y esta protesta solo perjudica a la gente que debe cumplir con su jornada”, reclamó un pasajero que descendió del vehículo para intentar persuadir a los bloqueadores.
La tensión escaló, por lo que los gendarmes intervinieron para habilitar el paso, pero terminaron a golpes con los manifestantes. No es la primera vez que ocurre un episodio similar, el martes ya se registró otro altercado en la misma calle Florida, una de las nuevas rutas del transporte público tras la restricción en la calle Seoane.
“Hasta que haya una solución, no permitiremos el paso de los micros. Estamos luchando por un espacio de estacionamiento y ya hemos solicitado una reunión con el alcalde”, afirmó una trabajadora de un taller mecánico.