Tras los ataques israelíes a instalaciones militares y nucleares iraníes, los precios del crudo Brent, referencia en Europa, y del West Texas Intermediate (WTI), referencia en EE. UU., mudaron de precio, de acuerdo al analista energético Boris Santos Gómez Úzqueda, quien agregó que mientras se realizan análisis, la situación real va a seguir cambiando.
El Brent llegó a subir más del 13%, alcanzando los 78,5 dólares por barril, mientras que el WTI subió cerca del 15%, llegando a 77,5 dólares por barril.
Para el consultor el golpe más certero podría ser si Israel/Estados Unidos bombardean la isla de Kharg (a 25 kms de la costa iraní) en donde están las principales terminales de logística de exportación de crudo, o el cierre del Estrecho de Ormuz, por donde transita aproximadamente el 20% del petróleo mundial y un tercio del gas natural licuado (GNL).
Ambos eventos, tanto el bombardeo a centros de logística de exportación iraní y el cierre del estrecho podría disparar los precios del Brent a 120-130 dólares por barril (proyecciones de Deutsche Bank y Oxford Economics), sostiene.
El analista indicó que, de todas maneras, de ocurrir, el cierre del estrecho, podría retirarse del mercado la circulación de 3 millones de barriles, y en caso de que colapse el sistema de exportación de crudo iraní, sería significativo para posicionar el Brent a 90/120 dólares.
Sin embargo, para paliar aquello la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP)+, liderada por Arabia Saudí, incrementará producción de crudo en semanas, inyectando más oferta y tratando de estabilizar el mercado, de acuerdo a analista energético.
Efecto
El análisis económico del economista y docente de la Universidad Técnica de Oruro (UTO), Ernesto Bernal, muestra preocupación por lo que pueda suceder en oriente medio con el conflicto bélico entre Israel e Irán, y más aún con la inclusión de Estados Unidos.
De complicarse la situación, el precio del crudo subirá e impactará en las finanzas bolivianas, debido a que la importación de combustibles y petróleo se podrían encarecer, y la situación se agrava por la falta de divisas.
Mientras el analista económico Darío Monasterio explicó que, si bien el incremento del precio del petróleo en el mercado mundial podría favorecer a las exportaciones de gas, pero el déficit hidrocarburífero que tiene el país muestra más perjuicio que beneficio.
Se importa más combustibles, por valor de 3.500 millones de dólares anuales, mientras las exportaciones de gas registran menos de 2.000 millones.